Otra Vez En Madrid...

Nunca había volado de noche. Que grata sorpresa. Cuando salía de Santiago hacía un sol radiante y al llegar a Madrid la Luna me esperaba. Y con la luna esos ojos sonrientes entre… ¿cómo definirlos? Azules… Grisáceos… Pero sonrientes…Fuimos a dar unas vueltas en coche. Vueltas y vueltas por las calles de Madrid.
Al llegar saludamos al rey de la casa. Pero esto no es un gato!!! Y como dirían en grandes esperanzas (diálogo que reproducimos):

- ¿Qué le da de comer?
- Otros gatos.

Pero así son los gatos de cuidad. Sobre todo si es el tuyo, que le mimas, le acaricias, le das muerdos. ¡ES EL REY DE LA CASA! Es precioso. Casi tanto como el dueño. El dueño es una joya. Charlamos, hiciste la cena y tu comida para mañana y esto es TODO para lo que dieron mis 3 primeras horas en Madrid. OTRA VEZ EN MADRID. Otra vez a tu lado.

Esto lo escribí entre lágrimas de emoción estando en Madrid (va a ser k tenía razón Larra que ‘Escribir en Madrid es llorar’). De la emoción de tanto tiempo separados. No se si esperais que os cuente unas vacaciones de grandes juergas, resacas infernales, ligues… Mmm… Pues no hubo nada de eso. Hubo encuentros, reencuentros, abrazos, miradas furtivas, fotos y muchos paseos.

Me vuelvo con el buen sabor de boca de escuchar en el Galileo-Galilei a Pancho Varona, creo que será la única vez que escuche en directo mi canción favorita ‘Con la frente Marchita’. De ese día tengo que hacer una reverencia agradeciéndole eternamente a Rafa sus paseillos, por haberle robado el tiempo y por hacer de acompañante en una tarde-noche estupenda.


Otro día de concierto concertado (Señores con la alegría de una misión cumplida yo me tiro a la bebida), fue en Las Ventas. El concierto era de un tal Joaquín Martínez Sabina. La misión cumplida veamos: Primero compartir el concierto que tanto esperábamos desde hace ya casi un año y con 3 intentos fallidos de por medio al final objetivo cumplido en Las Ventas. Y Segundo: Escuchar ‘Peor para el Sol’ en Madrid (canción que da nombre a este Bloguito).
Aquí también tengo que mencionar a Rafa por poner el punto bailongo y cantarín, porque hay seguretas que lo son siempre y disfrutan a su manera. Y gracias a Javi por guardar fielmente las entradas, los abrazos, los guiños y los muerdos mañaneros.

Ahora me doy un giro y me voy con la musica a otra parte. Yeah! Tuve un par de encuentros estupendos, con comida y café incluidos, en un restaurante para NO FUMADORES. Quién me iba a decir a mi que iba a acabar yo en un restaurante para NO FUMADORES…Ayyys… Cómo decirte… Cómo contarte… Pues diciéndoos que me aún queda gente estupenda con la que se puede conversar en este mundo. Que vale la pena hacer esfuerzos y dar sorpresas a quién menos se lo espera.

Y si sigo hablando de quien me acogió… ¿Qué contaros si ni a mi misma me salen las palabras? Tengo un montón de imágenes apelotonadas en la cabeza. Compartiendo la cocina, el sofa, viendo películas, yendo al videoclub, a la compra, con el gato entre los dos… Es como si lo viera allí todos los días y al mismo tiempo invadiendo su intimidad.

Lo peor de todo han sido los reencuentros que me han hecho ver la realidad pero no quiero hacer mención de ellos, porque me alegro de que mi gente sea feliz y siga adelante.

Y ya con la maleta facturada, y el billete en la mano, miré hacia atrás y no te ví. Me escapé por la puerta de embarque y no pude parar de llorar hasta Santiago. Ya te echo de menos a pesar de que todo sigue como siempre, ya han vuelto las llamadas interminables y nuestros días a días y es así como tiene que ser.